Cuando el trato hace la diferencia.
Quería que nuestra escapada por la Rioja fuese especial, después del suplicio que es el primer cuatrimestre del año, nada mejor que buena comida y hoteles con encanto, y el Palacio de Casafuerte cumplió con los dos requisitos.
Tan solo tiene 5 habitaciones, así que os podéis imaginar que suele estar completo, y es que Zarratón, el pueblo donde se encuentra, está a escasos diez minutos de Haro, la capital del Rioja, donde podemos visitar preciosas bodegas como López Heredia, Muga o C.V.N.E entre otras.
Para empezar, el edificio data del siglo XI, posteriormente fue la residencia del Conde de Casafuerte y se ha reconvertido en una acogedora hospedería de lujo decorada de manera exquisita con una mezcla de diversos estilos y en la que se han mantenido intactos los elementos arquitectónicos. Las estancias y el salón son amplios y en ellos se respira un ambiente de agradable confort que resalta aun más el valor histórico de la finca.
Y en segundo lugar, el restaurante del hotel, regentado por el hijo del propietario, ofrece una cocina tradicional con un toque de modernidad, a mi gusto, excelente, merece una entrada en el blog aparte. Se encuentra en el granero, conservado y decorado con mucho gusto, además, si tenéis tiempo, pedid que os enseñen los calaos del S. XI, que en breve volverán a ser usados para hacer su propio vino.
Como ya os he dicho, es un hotel pequeño y acogedor, donde el ambiente familiar reina y no es difícil compartir desayuno con los propietarios mientras os recomiendan que debéis visitar o os explican la historia del edificio. Sin duda, un diez en servicio, tan difícil de encontrar hoy en día.
https://www.casafuerte.es
Miguel de Villanueva 50
26291, Zarratón
La Rioja (España)